Castillo que se encuentra junto a la ermita de la Virgen de Montornès. En la cima de una colina a casi un km de la Pobla de Montornès.
El lugar es mencionado en 1066 en una donación por la que el conde de Barcelona, Ramón Berenguer I, y su esposa Almodis dieron a Ramon Transunyer ya su mujer Rotlenda en descendencia el monte llamado Puigperdiguers, con la obligación de construir una fortaleza. El lugar que según A Virgili constituía un castillo fronterizo, fue llamado posteriormente Montornès y fue el origen del municipio de la Pobla de Montornès. El 1099 Ramon Transunyer vendió los derechos a Berenguer de Rajadell y el 1173 un hijo o nieto del anterior, Ponç de Rajadell vendió el "castrum quod vocatur Montamos Vuelves" en el cenobio de Santes Creus que llegó a poseer prácticamente todo el término de Montornès.
El 1259, el abad Berenguer Aimeric otorgó una carta puebla a los habitantes de este asentamiento. Durante mucho tiempo, Montornès fue una granja del monasterio que nombró un mayoral administrador. En el censo de 1365-70, se contaban 37 fuegos. En el año 1391 el monasterio compró al monarca Juan I la jurisdicción civil y criminal y Montornès quedó en poder de Santes Creus hasta la extinción de las señorías. Desde ese siglo XV el castillo fue entrando en declive hasta el siglo XIX en que restó del todo abandonado, quedando destruido durante las Guerras Carlistas.
Esta masía está en el núcleo de la urbanización "El Castillo de Montornés". Se trata de una gran construcción documentada desde principios del XVI, estructurado entorno una gran torre, que es el elemento que sobresale y más destaca de la fachada. Esta está decorada con un coronamiento curvo y abierto en el interior y presenta dos torretas de guita y varias aspilleras. El cuerpo principal de la casa se desarrolla a lado y lado de la torre. El acceso se realiza a través de un portal de arco de medio punto adovelado desplazado ligeramente a la izquierda respecto a la torre. El edificio presenta varias ventanas situadas a diferentes alturas, dos de ellas con antepechos moldurados.
Todo el conjunto ha sido muy modificado; uno de los últimos elementos añadidos fueron las falsas torretas de guardia a dos de los ángulos superiores de la torre, incorporadas en el siglo XIX. Otra reforma corresponde seguramente a la fecha de "1797" visible en el interior del patio.